Desde que decidiste emprender online habrás oído en varias ocasiones hablar sobre la importancia de definir al cliente ideal. En este artículo te di ejemplos de 6 situaciones concretas en las que no podías avanzar con tu web sin conocer a tu cliente ideal.
Acuérdate que el cliente ideal era un personaje ficticio, tu cliente soñado que realmente está dispuesto a comprar tu producto o servicio porque resuelve un problema concreto que él tiene.
Hoy vamos a hablar sobre cómo definir al cliente ideal de nuestro proyecto web.
Esta parte me encanta porque te permite soñar un poco. Cierra los ojos y visualiza la persona a la que te gustaría atender en tu negocio, si pudieses pedir a un cliente ideal (nunca mejor dicho) cómo sería. Descríbelo con todos los detalles, ponle nombre y cara.
Contesta a estas preguntas para definir al cliente ideal para tu web
Información demográfica:
¿Es hombre o mujer?
¿Qué edad tiene?
¿Dónde vive? ciudad, país
Estado civil:
Información personal:
¿Trabaja o estudia?
Si trabaja, ¿En qué y cuál es su posición?
¿Qué ingresos tiene?
¿Qué nivel de estudios tiene?
¿Dónde vive y con quién?
¿Tiene hijos? ¿Cuántos y de qué edad?
Comportamientos:
¿Cuál es su comportamiento online?
¿Qué dispositivos utiliza, cuándo y cómo?
¿Cuál es su comportamiento en redes sociales?
¿Cuándo y cómo interactúa con las redes sociales?
¿Qué redes es más probable que utilice para compartir información o recomendaciones con sus amigos?
¿Hace compras online?
¿Qué le hace confiar en un blog o marca nueva?
Tipos de blogs que es probable que lea:
¿Qué páginas web visita?
¿Qué revistas lee?
Libros favoritos:
Aficiones:
¿Qué asuntos sociales le afectan?
Problemas:
¿Cuál es el problema que tu cliente ideal tiene y tú puedes ayudarle a resolver?
¿Cuáles son sus sentimientos frente a esos problemas?
¿Qué miedos y temores le están impidiendo alcanzar sus objetivos?
Sueños:
¿Qué le gustaría realizar? ¿Cuáles son sus anhelos?
¿Cuáles son sus sentimientos respecto a estos sueños?
Objetivos:
¿Cuál es el objetivo de su visita a tu web, por qué la está realizando?
¿Qué desea conseguir con la interacción que desarrolla con tu web?
¿Qué nivel de información tiene sobre tu producto/servicio?
¿Es consciente de que tú puedes solucionar su problema?
¿Hace falta saber todo esto sobre mi cliente ideal?
¡Uf, son muchas preguntas, ya lo sé! Pero a que si tuvieras que dirigirte a tu audiencia ahora, sabrías exactamente en que tono hacerlo, que palabras usar, si hacerlo mediante un artículo o mejor un vídeo.
Si quisieras poner un anuncio, seguramente que ahora ya sabes en que red social hacerlo. Porque por mucho que te guste Instagram, si tu cliente ideal es un hombre de 48 años con estudios universitarios, directivo y con interés por las noticias de actualidad, probablemente tendrías que ir a «pescar» a este cliente en Twitter.
Ahora que ya has definido a tu cliente ideal, piensa si hay otro perfil de cliente que podría estar interesado en tu producto o servicio y defínelo. Sí, como lo oyes (o lees). Puedes definir a varios clientes ideales. Por ejemplo, imagínate que te dedicas a vender apps educativas para niños de entre 5 – 8 años. Tu cliente, el que va a usar el producto, es el niño de unos 5 años. Pero también lo es la madre de 38 años, responsable del departamento de compras o su padre de 40 años, administrativo de un hotel, quiénes son los que van a hacer la compra.
Bueno, cuéntame, que ya estoy impaciente por leer en los comentarios cómo vas avanzando.